¿Has intentado adelgazar de muchas maneras diferentes sin éxito?
Después de tantos intentos infructuosos has oído hablar de las dietas bajas en carbohidratos. Tienen buena pinta. Muy buena pinta.

¿Por qué no darle una oportunidad?
Oyes hablar de cetosis, sabes que es el estado que te llevará a quemar grasas de una manera rápida, como en tus mejores sueños.
Pero cómo saber si estás en cetosis es ahora tu gran duda. Las tiras reactivas a cetonas te darán esta solución de una manera sumamente fácil
Contenidos
¿Qué es la cetosis?
Normalmente tu cuerpo obtiene energía de los hidratos de carbono que consumes.
Sin embargo hay un estado metabólico denominado cetosis. Su principal característica es que tu cuerpo utilizará grasa y cetonas como principal fuente de energía, en lugar de los azúcares.
Imagina el gran potencial de este estado para reducir tu peso. Eliminarás además justo lo que quieres, las grasas (aunque también mucha agua al principio).
También intuirás que si quieres que tu cuerpo deje de alimentarse de hidratos tal vez deberás eliminarlos o reducirlos al mínimo de tu dieta. Estás en lo cierto, esta es la manera de entrar en cetosis.
Normalmente la glucosa es almacenada en el hígado que la va liberando según tus necesidades. Cuando las reservas de azúcares se acaban, tu hígado comenzará a usar tus reservas de grasa para producir cetonas como fuente de energía. Cuando la concentración de cetonas en tu cuerpo pasa de un determinado umbral es cuando se considera que has entrado en cetosis.

La concentración de cetonas no debe ser tan alta como para llegar a la parte roja (cetoacidosis). La insulina generada por tu páncreas se encargará, sin ninguna duda, de reducir la concentración de cetonas.
Solo las personas diabéticas pueden llegar al estado límite de cetoacidosis, razón por la cual los diabéticos deben extremar las precauciones si se someten a dietas bajas en carbohidratos.
Hay dos maneras de entrar en cetosis:
- Con el ayuno: eliminamos la ingesta de carbohidratos totalmente, así como del resto de nutrientes. Aunque esta sea una manera rápida de conseguirlo, no es sostenible en el tiempo.
- Con dietas bajas en carbohidratos de las que hablaremos más adelante.
Beneficios de la cetosis
Dietas bajas en carbohidratos
Como su propio nombre indica estas dietas se basan en reducir la ingesta de hidratos de carbono a la mínima expresión.
Con este denominador común hay diferentes tipos de dietas.
Desde multisaludable no podemos aconsejarte que dieta es mejor para ti, pero sí te recomendamos que tengas una charla con tu nutricionista al respecto.
Ya sabes, las opiniones de los profesionales son fundamentales en todo lo relacionado con la salud. Vamos a ver unas pequeñas pinceladas de tres tipos diferentes de dietas bajas en carbohidratos.
Dieta cetogénica o dieta keto
La dieta keto está basada en consumir una gran cantidad de grasas. Te parecerá curioso comer principalmente grasas en una dieta que precisamente quiere eliminarlas. Pero te garantizamos que puedes conseguir resultados espectaculares con ella.

La composición recomendada de nutrientes ingeridos es: 70% grasa, 25% proteínas y 5% hidratos de carbono.
Dieta atkins
La dieta Atkins recomienda la reducción al mínimo de los hidratos en un principio para entrar en cetosis para luego ir aumentando poco a poco hasta llegar a un estado de equilibrio.

Hay múltiples variantes en función del tipo de alimentos y porcentajes de proteínas y grasas indicados en cada fase. Como concepto es muy interesante conocer las diferentes fases que propone Atkins:
Fase 1 de la dieta Atkins o inducción
La duración de esta fase será más o menos larga en función del peso que quieras perder (2-6 semanas). Solo debes tomar 20 gramos de carbohidratos netos al día (netos se refiere a hidratos de carbono puros una vez eliminada la fibra)
Fase 2 de la dieta Atkins o pérdida de peso progresiva
Se reintroducen más hidratos de carbono hasta llegar a unos 40-60 gramos por día netos. También se introducen nuevos alimentos. Esta fase suele durar de 2 a 8 semanas, pero te recomendamos mantenerte en esta fase hasta que estés a unos 4 kilos de tu peso ideal.
Fase 3 de la dieta Atkins o pre mantenimiento
Se va aumentando la ingesta de hidratos de carbono poco a poco junto con la introducción de todos los alimentos. Cuando tu pérdida de peso se paralice durante un mes, ya estás listo para la siguiente fase.
Fase 4 de la dieta Atkins o mantenimiento
Tomando como base la cantidad de hidratos tomados al final de la fase 3, ese será tu punto de equilibrio y esa cantidad es la que deberás seguir tomando diariamente el resto de tu vida.
Dieta dukan
La dieta Dukan tiene numerosos detractores. Esta dieta prioriza el consumo proteico frente a los otros grupos nutricionales.

Al igual que la Atkins se desarrolla en diferentes fases:
Fase 1 de la dieta Dukan, fase de proteínas puras o fase de ataque
Dukan sugiere comer sólo proteínas en esta fase (ten cuidado de no abusar de la carne roja), con una ingesta mínima de hidratos de carbono (2 cucharadas de salvado de avena al día) y nada de grasas. Te recomendamos que al ser una dieta muy agresiva acuerdes con tu nutricionista la duración de esta fase.
Fase 2 de la dieta Dukan, la fase de crucero
La grasa sigue prohibida. Se van alternando días de proteína pura con días de proteína más verduras. Deberías mantenerte en esta fase hasta que hayas alcanzado tu peso deseado.
Fase 3 de la dieta Dukan, la fase de consolidación
Se pueden empezar a comer alimentos que hasta ahora estaban prohibidos (1 pieza de fruta, 2 rebanadas de pan integral, 40 gramos de queso al día y 1 ración de pasta, arroz o legumbres a semana). Tienes que seguir haciendo un día de proteína pura y dispones de una comida libre a la semana (¡ojo!, una comida, no un día entero). Tienes que estar en esta fase 10 días por cada kilo que hayas perdido en las dos fases anteriores.
Fase 4 de la dieta Dukan, fase de estabilización
Vuelta a la libertad, siguiendo tres reglas básicas por el resto de tu vida.
- Haz un día a la semana de proteína pura.
- Come cada día 3 cucharadas de salvado de avena.
- Camina mínimo 30 minutos diarios.
Te hemos dado una pequeña visión de estas tres dietas. Si quieres conocerlas en profundidad te recomendamos tres buenos libros sobre ellas. Ah, y no se te olvide comentarlo con tu nutricionista.
¿Cómo usar las tiras reactivas de cetonas?
El uso es realmente muy fácil.
Puedes orinar en un bote, después sumergir la tira en el orín y mantenerla en posición horizontal entre 60-120 segundos (tendrás la cifra exacta para cada tira reactiva en su prospecto). En ese momento ya puedes comparar el color obtenido con la escala de colores en el envase para obtener una medición numérica.

O si lo prefieres puedes hacer el mismo proceso, mojando directamente la tira reactiva en el orín.
Es muy importante mantenerlas en horizontal mientras se produce la reacción química que da lugar a los colores, si no la medición se verá muy distorsionada.
¿Cómo elegir las tiras reactivas más adecuadas?
Estas son las cosas en las que te tendrás que fijar a la hora de elegir tus tiras reactivas:
- Precisión de la medida:
Tienes que tener en cuenta que la medición que obtengas será en base a una escala de colores, no es un número en una pantalla, con lo cual ahí ya tendrás un elemento de imprecisión.
La única manera que tienes de saber si una tira reactiva es realmente precisa es comparar los resultados con un análisis de sangre.
Los datos de precisión contenidos en la tabla comparativa provienen de hacer este ejercicio.
- Cantidad de tiras reactivas en el envase:
Este dato no tiene que ver con lo buenas o malas que son las tiras sino más bien con lo caras o baratas que son.
- Cantidad de parámetros que miden:
Te hemos hablado todo el tiempo de tiras reactivas de cetonas, pero hay algunas que miden otras variables. Estas tiras más completas tendrán muchas otras utilidades para el control de tu salud general, más allá de poder saber si estás en cetosis.
Estos son los diferentes datos que pueden llegar a medir en tu orín:
Leucocitos: los leucocitos están relacionados con el sistema inmunitario. Unos valores anormales de estos puede significar que el cuerpo esté luchando contra alguna infección.
Nitritos: la presencia de nitritos en orina es sintomática de una infección en el tracto urinario. Ojo que también puedes tener infección sin que los nitritos estén presentes
Urobilinógenos: la orina normalmente tiene que contener este elemento. Unos valores demasiados bajos nos alertarán de un funcionamiento anormal del hígado, mientras que unos valores altos significarán una enfermedad hepática en desarrollo.
Proteínas: es completamente normal que haya proteínas en la sangre, pero su presencia en orina puede ser debida a un mal filtrado por parte de los riñones.
PH: los valores normales de PH deberían estar entre 4,6 y 8. Valores demasiado altos pueden deberse a problemas en el riñón y demasiado bajos pueden estar relacionados con la cetoacidosis (demasiado concentración de cetonas)
Sangre: la presencia de sangre puede avisar de problemas en riñones, vejiga, uretra o próstata.
Densidad: los valores normales de densidad suelen ser entre 1005 y 1030. valores anormales pueden deberse a problemas de corazón, del sistema circulatorio o del sistema hormonal.
Cetonas: hemos hablado largo y tendido de ellas.
Bilirrubina: si se encuentra en la orina nos avisa de problemas de hígado
Glucosa: la concentración esperable de glucosa en la orina es entre 0 y 0,8 mmol/l. valores elevados pueden significar funcionamientos anómalos de los riñones o principios de diabetes.
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